El presidente de Kazajstán, Nursultán Nazarbáyev, exhortó hoy a los miembros de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) apoyar la iniciativa de su país y adoptar una declaración universal sobre un mundo libre de armas nucleares.
“Llamamos a nuestros socios de la OSCE adoptar una declaración sobre un mundo desnuclearizado”, dijo el presidente kazajo durante la inauguración de la primera reunión de máximo nivel de dirigentes de la OSCE desde 1999.
Nazarbáyev recordó que en su momento Kazajstán rechazó las armas nucleares.
“Nuestro pueblo sintió en su propia carne las consecuencias de la Guerra Fría. Eso se refiere, en primer lugar, al polígono nuclear de Semipalatinsk. Mi decreto sobre su cierre y la renuncia a armas nucleares fue el primer aporte de Kazajstán al proceso de desnuclearización en toda Europa”, dijo el líder kazajo.
Además, Nazarbáyev propuso la creación del Instituto de Seguridad de la OSCE con sede en Astaná.
“Creo que la OSCE debería desplegar un trabajo sobre la previsión de diversos problemas de seguridad en el mundo. Como primer paso, propongo instituir un Instituto de Seguridad de la organización, que podría ubicarse en Astaná”, afirmó.
La anterior reunión al máximo nivel de los jefes de Estado de la OSCE se celebró a finales del siglo pasado en Estambul.
En el polígono nuclear de Semipalatinsk, en el sur de Kazajstán, durante 40 años de su funcionamiento se llevaron a cabo 490 pruebas nucleares. La población afectada por esos ensayos asciende a más de 1,5 millones de personas.
