Moscú, 19 de julio, RIA Novosti. Los servicios de Inteligencia de EEUU y también de unos países de Europa afirman que el presidente de Egipto, Hosni Mubarak, es un enfermo terminal, informó The Washington Post.
Mubarak, de 82 años, tiene cáncer del estómago y el páncreas, señalan dichos servicios y como una prueba indican los frecuentes viajes del presidente al exterior con fines de tratamiento, en particular, a Alemania y Francia, donde fue operado en primavera y verano de 2010.
Portavoz de un servicio secreto europeo dijo a The Washington Post que Mubarak no llegará a las próximas elecciones presidenciales fijadas en Egipto para septiembre de 2011. Militares de EEUU ya están analizando la situación que surgirá en Egipto y Oriente Próximo tras la defunción de Mubarak, informa el rotativo.
Al mismo tiempo, el político israelí Benjamin Ben Eliezer, ministro de Comercio en el actual Gabinete, valoró el 18 de julio el estado de salud del presidente egipcio como "excelente" y dijo que Mubarak, a quien enfadan mucho los rumores sobre el mal estado de su salud y la próxima muerte, permanecerá al timón del país durante mucho tiempo todavía.
