La autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD), que hoy decidió separarse de Ucrania y solicitó la adhesión a Rusia, anunció el lanzamiento de una operación antiterrorista contra “grupos neonazis ucranianos”.
Una orden que lleva la firma de Ígor Strelkov, flamante comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de la república, estipula “imponer en el territorio de la RPD un régimen de operación antiterrorista, detener a los combatientes de grupos neonazis ucranianos (Guardia Nacional, Pravy Sektor, Batallón de Liashkó y otros) y, si oponen resistencia armada, eliminarlos en el lugar”.
Strelkov reivindicó también el control de todos los grupos armados y cuerpos de seguridad en la RPD, estructuras de policía, aduanas, fronteras, fiscalía y formaciones paramilitares.
“Todos los jefes (militares) han de cumplir en adelante mis órdenes”, anunció Strelkov.
La víspera, los independentistas de Donetsk celebraron un referéndum en el que el “sí” a la autodeterminación obtuvo el 89,7% de los votos, y el “no” el 10,19%.
Las manifestaciones a favor de la federalización estallaron en el este de Ucrania, de población mayoritariamente rusoparlante, en marzo pasado, varias semanas después de que en Kiev se produjera un cambio de poder de legitimidad cuestionable.
A mediados de abril, el Gobierno central lanzó una “operación antiterrorista” para reprimir las protestas federalistas cuyos participantes habían tomado edificios oficiales y proclamado la creación de “repúblicas populares”.