La situación en Zhanaozen, ciudad al oeste de la república en la que la víspera se registraron disturbios masivos, está bajo el control, declaró hoy el presidente de Kazajstán, Nursultán Nazarbaev.
“En el momento actual las fuerzas del orden controlan la situación y los culpables se llevarán el castigo merecido”, dijo Nazarbaev en la reunión del Consejo de Seguridad, celebrado este sábado.
El presidente pidió a los ciudadanos de la república “condenar este incidente ajeno a nuestro país y mantener la calma”.
Nazarbaev informó que había decretado el estado de excepción en Zhanaozen con objeto de proporcionar la seguridad ciudadana y reconstruir la infraestructura urbana.
Según el presidente, el decreto correspondiente “se mantendrá en vigor durante 20 días” a contar de este sábado.
Nazarbaev indicó que “los agentes de policía cumplieron con su deber profesional y actuaron conforme a la ley, dentro de sus competencias”. “Es inadmisible confundir el litigio laboral de los trabajadores petroleros con la actuación de los bandidos que pretendían aprovecharse de la situación en intereses criminales propios”, resaltó.
Según los datos de la Fiscalía General de la república, al menos once personas murieron y varias resultaron heridas a raíz de los disturbios masivos registrados el pasado viernes en Zhanaozen, ciudad en la que desde hace más de seis meses se declararon en huelga los trabajadores petroleros, descontentos con la cuantía de los salarios que perciben.
Durante los disturbios fueron incendiados el edificio de la administración urbana, un hotel y la sede de la empresa Ozenmunaigaz, así como fueron destruidos bienes de personas físicas y jurídicas.
