La central nuclear de Bushehr que construye Rusia en Irán responde a todas las normas de seguridad desde el punto de vista tanto tecnológico como sísmico, declaró hoy el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov.
"La planta nuclear de Busher responde a todas las normas de seguridad desde el punto de vista tanto tecnológico como sísmico, y lo controlan no los iraníes, sino el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA)", dijo Lavrov al término de la cumbre de ministros de Asuntos Exteriores del Grupo de los Ocho (G-8).
La compañía rusa Atomstroiexport (pertenece a la corporación Rosatom) es la contratista general de la construcción de la primera central nuclear iraní.
Las obras fueron iniciadas en 1974 por el consorcio alemán Kraftwerk Union A.G. (Siemens/KWU), pero en 1980 la compañía rompió el contrato debido a la decisión del Gobierno alemán de apoyar el embargo de EEUU sobre el suministro de equipos a Irán.
Rusia firmó en 1998 un contrato con Irán para completar las obras en Bushehr. El lanzamiento de la central ha sido pospuesto en varias ocasiones por razones financieras o técnicas.