Los ataques terroristas sacudieron el 22 de marzo a las 08.00 hora local a Bruselas: primero, dos explosiones se produjeron en el aerpouerto de Zaventem causando al menos 11 muertos; luego, los terroristas perpetuaron un segundo ataque en la estación Maelbeek del metro de la capital belga que provocó al menos 20 muertos.
Las autoridades del país calificaron los ataques de terroristas mientras que el grupo yihadista Daesh (autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia y en otros países) asumió la responsabilidad por los ataques.
Presuntamente, las explosiones fueron realizadas por tres terroristas suicidas. En plena operación policial las fuerzas de seguridad belgas encontraron una bomba más en el aeropuerto que luego fue neutralizada por una explosión controlada.
Tras los ataques, las autoridades ordenaron la clausura temporal del aeropuesto y la suspensión del tráfico ferroviario en la ciudad.
El Gobierno belga anunció tres días de luto nacional.