La explosión, ocurrida en un autobús de línea en la Ciudad Togliatti, dejó un saldo de ocho muertos y más de 50 damnificados. La mayoría de los muertos y heridos son estudiantes, pues la ruta del autobús pasaba por la calle en la que se ubica la mayor parte de los centros docentes superiores de la ciudad.
Entre las víctimas mortales no hay niños. Fallecieron en la explosión principalmente las estudiantes de la Universidad de Togliatti y una empleada de la alcaldía, de 32 años.