"La cartera de pedidos de aviones y helicópteros militares supera los 22.000 millones de dólares con un marcado interés por parte de los países de Oriente Medio y el norte de África", dijo Serguéi Kórnev, jefe del departamento de exportación de bienes y servicios de la Fuerza Aérea Rusa.
Kórnev atribuyó este interés a los éxitos de la aviación rusa en la lucha contra el grupo terrorista Daesh, autoproclamado Estado Islámico, en Siria y el lanzamiento de nuevos modelos en el mercado mundial.
"La buena relación coste-eficacia y la reputación de Rusia como un socio fiable y responsable favorecen la consolidación de la demanda", apuntó Kórnev.