"La Armada tendrá el submarino, los trabajos avanzan y se tienen en consideración todas las exigencias enumeradas por el Mando naval", dijo Chirkov citado por la oficina de prensa del Ministerio de Defensa.
Esta declaración ha sido hecha en el contexto de una complicada situación económica que atraviesa Rusia, y por lo cual tuvieron que modificarse los gastos del erario público.
No obstante, Rusia no piensa suspender el desarrollo del portaaviones.
"La Armada necesita un portaaviones con características del día de mañana", apuntó Chirkov.
El Comandante adjunto de la Marina rusa, Víctor Barsuk, había comentado que el nuevo portaaviones entraría en servicio después de 2030.