La Constitución de Malasia establece que el rey, que ostenta las funciones de jefe de las Fuerzas Armadas y del Estado, es elegido de forma rotatoria cada cinco años de entre los nueve gobernantes malasios. Muhammad V, sultán del estado de Kelantan, fue elegido al trono de la federación el 13 de diciembre de 2016.
Su renuncia el pasado 6 de enero fue una sorpresa para todos y supuso la primera abdicación desde que el país asiático se declaró independiente en 1963.
Esta decisión sin precedentes llega después de que el monarca se reincorporara a su trabajo tras dos meses de baja. Muhammad V sorprendió a todos en noviembre de 2018, cuando en el pueblo de Barvikha, cerca de Moscú, celebró su boda con la rusa Oksana Voevodina.
Oksana Voevodina nació en la región rusa de Rostov, en le sur del país. Tras terminar sus estudios escolares, se mudó a Moscú para ingresar a la Universidad Económica Gueorgui Plejánov. En la capital rusa participó y venció en el concurso de belleza Miss Moscú 2015.
CONGRATULATIONS YDPA SULTAN MUHAMMAD V, MENJUJUNG KASIH TUANKU! pic.twitter.com/FGxal2kuBI
— Nursafhia (@Nursafhia1) 23 de noviembre de 2018
No se sabe cómo y cuándo se conocieron Muhammad y Oksana. Los amigos y familiares de la joven mantienen total discreción al respecto.
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Sea como sea, la joven rusa no puede ostentar al título de reina de Malasia, ya que ese título está reservado solo para las nobles del país. Para Muhammad V, este fue su segundo matrimonio: de 2004 a 2008 estuvo casado con Kangsadal Pipitpakdee, miembro de la realeza malasia, con la que no tuvo hijos.
Su reinado estuvo marcado por la reducción de los gastos reales en un 10% y el indulto al principal opositor del país, Anwar Ibrahim. El nuevo rey deberá ser elegido en un período de cuatro semanas.