La gente empezó a saltar de los vagones a las vías después de que un pasajero empezara a gritar fragmentos de la Biblia sobre pecados, informa el periódico británico Daily Mail.
Según un testigo que en ese momento se encontraba en el tren, el sermón provocó alboroto y caos porque la gente llegó a temer por su vida.
"(…) Causó tanto pánico que la gente forzó las puertas del tren para abrirlas y saltó a las vías", escribió un tuitero. Un poco más tarde, el mismo internauta comunicó que un agente de seguridad que había cacheado al individuo "solo pudo hallar dentro de su bolsa varias bebidas y libros".
Posteriormente, el pasajero fue entregado a la policía en la estación de la ciudad de Wimbledon. Este incidente afectó al horario habitual de los trenes urbanos de Londres.
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