La entrenadora personal de 54 años fue golpeada por un canguro macho de dos metros de alto mientras trotaba cerca de su casa a las seis de la mañana.
Lea también: Prohibido tocar a la osa, una mujer es violentamente atacada en directo
La víctima se las ingenio para fingir su muerte y así escapar del animal. Luego de que el atacante se alejara, la entrenadora corrió 500 metros hasta su casa, gritando, cubierta de sangre. Fue de esta manera que su esposo, Robert, la consiguió y la llevó al hospital.
"Me destrozó", afirmó Urquhart, citada por el medio. Incluso, después de que el animal se alejara, "pensé que regresaría para matarme".
"Cada vez que cierro mis ojos [lo veo] de manera vívida, es horrible (…) Si me hubiese golpeado en mi estómago, me podría haber matado", sostuvo la australiana.
35 stitches: Debbie Urquhart Melbourne jogger attacked by kangaroo https://t.co/9e6OCDrCZw #Australia #Kangaraoo attack
— Scallywagandvagabond (@ScallywagNYC) 16 de enero de 2017
La excelente condición física de Urquhart ayudó a que el asalto no fuese mortal.
Este ataque recuerda a la vez en la que un canguro y un hombre llegaron a las manos para defender a un perro.