El último acontecimiento que ha despertado el interés de las unidades de la Fuerza Aérea de Estados Unidos desplegadas en el golfo Pérsico han sido las grandes maniobras militares de defensa antiaérea 'Los defensores del cielo 7', que se prolongaron durante tres días.
Coincidiendo con la realización de estos ejercicios militares, Irán emitió varias advertencias para que los aviones de reconocimiento estadounidenses se abstuvieran de acercarse a la zona.
Es una provocación clara, precisó en una entrevista con Sputnik el conocido politólogo de la República Islámica Sabbah Zanganeh, exasesor del ministro de Asuntos Exteriores y exembajador de Irán ante la Organización de Cooperación Islámica.
"Este incidente obliga a plantear una serie de preguntas a los estadounidenses. ¿Qué están haciendo, en general, en esta región? ¿Cuál es la razón de su presencia? ¿Por qué alimentan tensiones y conflictos aquí? ¿Por qué tratan de interferir en los asuntos internos de estas 'zonas sensibles'? ¿Qué hacen en la inmediata proximidad —a unos pocos kilómetros— de las fronteras de la República Islámica?".
Los iraníes regalaron hace poco a sus colegas rusos una réplica del famoso avión-espía estadounidense RQ-170 Sentinel, que lograron capturar en 2011 sin apenas causarle desperfectos y más tarde copiar.
Y este es solo uno de los muchos casos de presencia ilegal de aeronaves estadounidenses en las fronteras iraníes, dice el jefe de la redacción del periódico iraní Iran Press, Emad Abshenass:
"EEUU y sus aliados están muy ansiosos por saber qué armas y tecnologías de defensa tiene Irán. Estas maniobras por parte de los norteamericanos persiguen dos objetivos: recoger el máximo de información sensible y evaluar el nivel de preparación para el combate de las fuerzas iraníes y su capacidad de defensa general en caso de que se produzcan ataques potenciales. Sin embargo, numerosos intentos por conseguirlo, fracasaron. Por lo tanto, deberán estar planeando algo diferente para la próxima vez".