"Una fuerza rotacional de 4.000 soldados se concentrará en el flanco este", dijo el secretario de Estado adjunto de EEUU, Antony Blinken, durante su visita a Polonia.
Blinken se reunió en este país con el ministro de Exteriores y representantes de la administración presidencial.
Anteriormente, el general estadounidense Curtis Scaparrotti, al asumir el cargo de nuevo comandante supremo de la OTAN en Europa, instó a los Estados miembros del bloque militar a estar preparados para contrarrestar a Rusia y el terrorismo.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, salió al frente de estas duras declaraciones y aseveró que Rusia no suponía ninguna amenaza para nadie y prometió que el país reaccionaría a los actos que pudieran representar una amenaza directa o potencial a sus intereses.