"Fueron probados dos ARS-600, uno monoplaza y otro biplaza, que se sumergieron a una profundidad de más de 600 metros y llevaron a cabo trabajos submarinos de búsqueda y rescate", comentó citado por el servicio de prensa de la Armada de Rusia.
Shajutdínov indicó que los ensayos confirmaron que las características técnicas de los ARS-300 les permiten buscar submarinos averiados y hundidos, examinar su estado y evacuar a la tripulación.
Según el Ministerio ruso de Defensa, el Servicio de Búsqueda y Rescate de la Armada rusa recibirá estos vehículos para finales de noviembre de 2015.