"Los buques, divididos en cuatro grupos tácticos, ejercitaron distintos métodos de transmisión de señales y la disposición de las embarcaciones, analizando, al mismo tiempo, la situación en la superficie del mar y en el aire en la zona de los entrenamientos", reza el comunicado.
La agrupación la forman por la parte rusa el crucero de misiles Moskvá, el aerodeslizador Samum, los buques de desembarco Alexandr Otrakovski y Alexandr Shabalin, el patrullero Ladni y el remolcador MB-31; y por la parte china, los patrulleros Lin Yi y Weifang y el barco de apoyo logístico Wei Shanghu.
Anteriormente un alto cargo militar ruso subrayó que "estos ejercicios navales no apuntaban contra ningún tercer país y solo perseguían el objetivo de fortalecer la comprensión entre las flotas de las dos grandes potencias, contribuir al fortalecimiento de la estabilidad y elevar la capacidad de afrontar los nuevos desafíos y amenazas en el mar".