Los habitantes del poblado Lugánskaya se despidieron de sus coterráneos Vladímir Ermílov y su hijo Vania, de cinco años.
Los habitantes del poblado Lugánskaya se despidieron de sus coterráneos Vladímir Ermílov y su hijo Vania, de cinco años.
Los Ermílov murieron a consecuencia de los ataques aéreos a la estación Kondrashévskaya-Nóvaya.
El 2 de julio, durante los ataques aéreos a la zona de la estación Kondrashévskaya-Nóvaya, varios proyectiles impactaron en viviendas.
El fuego del ejército ucraniano contra poblados del este del país, tras el fin del armisticio el pasado 1 de julio, ha provocado numerosas víctimas entre la población civil.
Decenas de civiles han muerto o han resultado heridos durante los últimos tres días debido al fuego de artillería y los ataques aéreos durante la operación especial que lleva a cabo el Gobierno de Ucrania en el territorio de la autoproclamada República Novorossía. Solo en el poblado Lugánskaya el 2 de junio perdieron la vida cerca de diez personas y más de diez resultaron heridas.
Tras el fin del armisticio los militares ucranianos llevan a cabo intensas acciones combativas contra las milicias, sin embargo, como afirman las autoridades locales, golpean objetivos que no están relacionados en modo alguno con la infraestructura militar de los milicianos.
Parientes y dolientes durante el entierro de Vladímir Ermílov y su hijo Vania, víctimas del fuego del ejército ucraniano contra el poblado Lugánskaya.
Entierro de Vladímir Ermílov y su hijo Vania, víctimas del fuego del ejército ucraniano contra el poblado Lugánskaya.
