Bassin de la Villette es el lago artificial más grande de la capital francesa. Un lugar muy socorrido en esta época del año, más aún en momentos como este, en que se esperan temperaturas que rocen los 40 grados centígrados.
Eso sí, todo el que quiera bañarse en este estanque tendrá que tener en cuenta la limitación del aforo impuesta por las autoridades: solo se dará acceso a 200 personas cada dos horas. Además, estar en el agua no será excusa para no mantener el distanciamiento social.
En funcionamiento desde 1808, Bassin de la Villette une el canal de l’Ourcq y el canal Saint-Martin y forma parte de la red de canales de la ciudad del amor. Un chapuzón aquí y los parisinos quedan como nuevos para seguir con sus quehaceres.