Debido a la pandemia de coronavirus, por primera vez en la historia se reveló una pintura de un miembro de la familia real en línea. Miriam Escofet, autora de la pintura, le mostró y explicó cada detalle de la obra a la monarca durante una videollamada.
A Isabel II parece haberle apetecido el retrato encomendado por el Ministerio de Relaciones Exteriores del Reino Unido como un "tributo duradero al servicio de su majestad" a la diplomacia. Sin embargo, notó la falta de algo muy importante en la cultura británica: el té.
"Cuando le expliqué ciertos elementos de la pintura, como la taza de té, [la reina] hizo algunos comentarios divertidos. Dijo 'pero no hay té en la taza'", compartió Escofet, citada por Sky News.
La artista explicó a la monarca de 94 años que "el té había sido sacrificado por el simbolismo" oculto en la taza: el dibujo de la insignia de la Cancillería británica. Según Escofet, la reina reaccionó muy positivamente a la pintura de manera general.