Dar un paseo por el centro de la capital alemana estos días resulta reconfortante. Berlín empieza a recuperar la vida característica de sus calles más transitadas antes de la era del coronavirus.
Muchos berlineses han decidido aprovechar el levantamiento parcial de las restricciones que los han privado de tomarse el café de media mañana en su bar de costumbre o de cenar en su restaurante favorito desde mediados de marzo.
Esta medida forma parte del plan de las autoridades del país para el retorno gradual a la actividad habitual tras duras restricciones dirigidas a contener el avance de la pandemia de coronavirus. Esta, tras más de 174.470 contagios, ha sido la responsable de más de 7.880 muertes en el país germano hasta ahora, según datos de la universidad estadounidense Johns Hopkins.