"Hablé con el presidente Vucic, él encargó a la Agencia de Seguridad Militar que investigue el caso. Todavía no tenemos todos los datos, si todo resulta ser cierto, entonces será un problema grave y un problema para nosotros", declaró Brnabic al tabloide Blic.
La primera ministra agregó que "el presidente convocó una reunión en su calidad de comandante en jefe y nos informará de los resultados de la investigación".
Vulin reconoció que "la situación es grave y el comandante en jefe sacará conclusiones después de un examen exhaustivo y minucioso".
El ministro opinó, sin embargo, que "detrás de los bastidores hay un intento de distanciar a Serbia de la política de neutralidad militar".
Reacción de Rusia
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, expresó la confianza de que las denuncias del supuesto reclutamiento, realizado por la inteligencia rusa, de un militar serbio no afecten la relación entre Belgrado y Moscú.
"Estamos convencidos de que Rusia y Serbia mantienen una relación tan especial, de socios, hermanos y aliados, que nada puede afectarla", dijo Peskov.
El portavoz de la Presidencia rusa señaló que "todavía es necesario esclarecer el incidente".
A su vez, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, declaró que Moscú exige presentar pruebas que confirmen la autenticidad del vídeo que provocó el escándalo de espionaje.
"Me parece que se debe confirmar todos los hechos: cuándo fue grabado el vídeo, quién está grabado... y luego lo comentaré", dijo Zajárova.
Explicó que sin pruebas concretas no tiene sentido comentar algo.
"No estoy esquivando comentarlo. Definitivamente volveré a este tema cuando tenga algunos hechos. No puedo decirles nada todavía, porque no hay pruebas", agregó.
Señaló que "es el uso de cierta tecnología para algún propósito".
El 20 de noviembre, Blic publicó un artículo titulado ¿Reclutan espías rusos a oficiales serbios?, con imágenes del exagregado militar adjunto de Rusia en Belgrado, Gueorgui Klebán, intercambiando bolsas con "un agente serbio de alto rango, un oficial".
Más tarde, varios medios locales recogieron un vídeo grabado con cámara oculta que muestra el proceso del intercambio en un lugar público y, luego, al supuesto oficial serbio sacando de la bolsa que había recibido un sobre con un fajo de billetes para contar.
Un alto funcionario de la Agencia de Información de Seguridad corroboró en la televisión nacional que los servicios especiales de Serbia consideran que la persona del vídeo es un "espía ruso", aunque no reveló quién es el supuesto reclutado.
