"Es como un superbólido de la Fórmula Uno con la mitad de los cilindros funcionando", dijo en un discurso ante miembros de la Confederación de la Industria Británica (CBI, por las siglas en inglés).
El dirigente conservador, que intentará refrendar su mandato en las legislativas del próximo 12 de diciembre, responsabilizó al Parlamento de Westminster de la parálisis política desde la victoria del Brexit en el referéndum de 2016.
"La política está frenando al país", criticó antes de reprochar el "fracaso del Parlamento" a la hora de "honrar el mandato del pueblo y ejecutar el Brexit.
"Se dice que yo soy antinegocios, lo cual es un disparate absoluto", aseguró el veterano izquierdista.
Corbyn reclamó la confianza de la patronal a la "revolución industrial verde" que los laboristas prometen desencadenar mediante inversión pública, formación del personal y acceso gratuito a las comunicaciones con banda ancha en todo el país para 2030.
"Si eligen un gobierno laborista el 12 de diciembre, verán la mayor inversión que jamás hayan soñado, la mano de obra mejor formada, una infraestructura líder mundial…", garantizó a los industrialistas.
Por último, Jo Swinson, cabeza de los Liberal Demócratas, defendió su plan para cancelar el Brexit y continuar dentro del bloque comunitario europeo.
"El voto para abandonar la UE ha distraído al Gobierno de las cuestiones reales de la economía y ha creado mucha incertidumbre sobre el futuro de nuestro país", criticó.
Para Johnson representa su primera prueba en las urnas nacionales desde que fue elegido a la Jefatura del Gobierno por la militancia conservadora a finales del pasado julio.
En esta segunda semana de campaña, la principal formación de derecha lleva un promedio de ventaja de 14 puntos respecto al segundo gran partido, el laborista.
Los sondeos del fin de semana dan a los conservadores una media del 43% en intención de voto, seguidos del laborismo de Corbyn, con el 30%, Liberal-demócratas (14%) y el Partido del Brexit, (7%).