El dirigente conservador expuso sus condiciones de negociación en una carta remitida al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
"La salvaguarda no puede formar parte de un consensuado acuerdo de retirada, esto es un hecho que ambos debemos aceptar", demanda en su primera comunicación formal con la UE sobre el Brexit.
El dirigente conservador enumera tres razones que llevó a su administración a rechazar un compromiso propuesto, precisamente, por la anterior jefa del Gobierno del Reino Unido, Theresa May.
Se añade en la carta que, "en segundo lugar, es inconsistente con el deseo último de Reino Unido de labrar una relación sostenible y duradera con la UE".
Johnson también indica que la salvaguarda "corre el riesgo de debilitar el delicado equilibrio" entre las enfrentadas comunidades de Irlanda del Norte creado por el Acuerdo de paz de 1998.
Los unionistas norirlandeses del partido DUP, que garantizan la mayoría del Gobierno conservador en el Parlamento de Westminster, se oponen radicalmente a esta sección del pacto con la UE, que solo entraría en vigor si ambas partes no llegan a un acuerdo comercial al término del periodo de transición del Brexit.
Johnson ofrece a cambio estudiar "constructiva y flexiblemente compromisos que puedan ayudar" si dichos métodos alternativos no llegan a implementarse antes de que expire el plazo de transición.
El mandatario conservador transmite a Tusk su creencia de que "un acuerdo es posible" antes del 31 de octubre pese a la reticencia de la UE a reabrir el acuerdo de retirada.
Johnson tiene previsto reunirse con la canciller alemana, Angela Merkel, en Berlín, el miércoles 21 de agosto, y con el presidente francés, Emmanuel Macron, en París, el jueves 22, antes de asistir a la cumbre del Grupo de los Siete durante el fin de semana.