"Es una medida indeseable y urgimos a Teherán a no dar más pasos provocadores y a cumplir con sus compromisos", declaró en el Parlamento el secretario de Estado de Exteriores, Mark Field.
El político conservador compareció en los Comunes en respuesta a una moción de urgencia presentada por un diputado de su propio partido.
Field recordó que la eliminación de los vetos comerciales y las penalizaciones financieras es una parte "esencial" del PAIC debido, entre otros factores, a su "impacto positivo en las vidas de los iraníes".
"No estamos hablando de reimponer sanciones… pero habrá consecuencias si Irán deja de cumplir sus compromisos", desafió.
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El cargo ministerial defendió la urgencia de "mantener el dialogo" con Teherán y resaltó la "determinación" de Reino Unido y el resto de la Unión Europea por reabrir las rutas comerciales con el país musulmán.
El Gobierno de Theresa May está en contacto con el resto de los participantes en el acuerdo nuclear, con vistas a dar una respuesta consensuada a la declaración de Irán.
Este 8 de mayo el Consejo de Seguridad Nacional de Irán anunció la suspensión parcial del PAIC en respuesta a la retirada de Estados Unidos, medida que entrará en vigor dentro de 60 días si no hay avances por parte de los países europeos.
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El 8 de mayo de 2018 Estados Unidos se retiró del PAIC, suscrito en 2015, y a los poco meses restableció sus sanciones unilaterales contra Irán.
Washington busca además reducir a cero las exportaciones del petróleo iraní.