El pasado 1 de mayo, la corresponsal de RIA Novosti Victoria Ivanova fue agredida por la policía durante una protesta de los 'chalecos amarillos', pese a portar una insignia de prensa claramente visible, y le fue diagnosticada una conmoción cerebral, además de magulladuras en el brazo y antebrazo izquierdos.
Para Soloviov, se trata de un claro ejemplo de que la libertad de expresión y de prensa en Francia no es más que una declaración verbal.
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Con anterioridad la periodista Ivanova relató que estaba el 1 de mayo en el foco de disturbios, grabando lo que pasaba con su teléfono móvil, cuando los agentes de la policía empezaron a dispersar a los vándalos con porrazos indiscriminados.
El grupo mediático Rossiya Segodnya, del que forma parte RIA Novosti, expresó su indignación por el incidente.
Por su parte, la representación rusa ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) exigió una reacción a lo ocurrido por parte del encargado para la libertad de los medios de la organización internacional, Harlem Désir.
Soloviov destacó que anteriormente la Unión de Periodistas de Rusia ya denunció el caso ante la FIP, pero no recibió ninguna reacción.
