"No obstante las declaraciones sobre el apego a los ideales de la democracia y el respeto de las libertades y los derechos humanos, las autoridades de Ucrania desataron una persecución contra todos los que tienen puntos de vista diferentes a los oficiales… Son perseguidos muchos medios y periodistas ucranianos independientes, entre ellos Kiril Vishinski", destaca el escrito de la Cancillería rusa.
"En los últimos cinco años, Ucrania se vio invadida por una ola de violencia y delitos cometidos por motivos políticos e ideológicos, que en la mayoría de los casos no recibieron una valoración judicial adecuada", dice el texto.
El 15 de mayo de 2018, las fuerzas de seguridad detuvieron al jefe del portal RIA Novosti Ukraina, Kiril Vishinski, por escribir sobre el referéndum de Crimea, que se llevó a cabo en 2014.
Detenciones, asesinatos y deportaciones, ¿por qué es peligroso ser periodista en Ucrania? #TruthNotTreason
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 17 мая 2018 г.
https://t.co/Ph5uPf7DpD
El Gobierno ucraniano acusa a Vishinski de alta traición y también de apoyo a las milicias de Donbás, cargos por los que podrían condenarlo a 15 años de prisión.
Desde Rusia han condenado la detención del periodista y han instado al Gobierno ucraniano a cesar las arbitrariedades.
Más: Rusia rechaza usar a Vishinski y a otros periodistas como moneda de cambio
El presidente Vladímir Putin enfatizó que Vishinski fue arrestado por ejercer su profesión y cumplir su función de periodista e instó al gremio y a las organizaciones internacionales de derechos humanos a actuar ante la "política inaudita y absolutamente inadmisible que aplican las autoridades ucranianas".
"Parece que Kiev sigue 'descongelando' la situación en la región y busca intimidar a sus habitantes, todo esto se inscribe en la lógica de la creciente campaña electoral de [presidente ucraniano] Petró Poroshenko (…) En este juego, Kiev recurre a las más viles provocaciones y trata de involucrar a los observadores de la OSCE, poniéndolos en peligro", dijo el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
La Cancillería rusa recuerda que, "afortunadamente", las explosiones no provocaron víctimas.
El Ministerio de Exteriores advierte de que la campaña electoral de Poroshenko tiene por objetivo "desviar la atención de los electores de los problemas económicos y sociales, el empobrecimiento masivo, la huida de la población en edad de trabajar del país y la persecución contra el clero y los creyentes de la Iglesia ortodoxa ucraniana (del Patriarcado de Moscú, la canónica), hacia los combates en Donbás", así como "responsabilizar a Rusia por los fracasos políticos" del Gobierno ucraniano.
El comunicado señala además que en estos últimos tiempos los observadores de la OSCE constataron una drástica intensificación de los ataques en la línea de separación en Donbás.
"Solo en las últimas dos semanas detectaron unas 10.000 violaciones del alto el fuego, de nuevo se usó artillería pesada", indica el escrito.
Agrega que Kiev concentra equipos y municiones en las provincias de Donetsk y Lugansk y traslada allí más fuerzas, incluidos batallones de castigo.
Moscú llama a Occidente a ejercer su influencia en el Gobierno ucraniano "para que se abstenga de aventuras militares, que podrían tener consecuencias catastróficas".