"Es necesario concentrar los esfuerzos en sujetos malintencionados, en particular en fuentes rusas, tal como estipula el Plan de Acción, que cada vez más utilizan estrategias de desinformación", dicen las conclusiones de la institución.
En diciembre de 2018 el embajador ruso ante la UE, Vladímir Chizhov, denunció que Bruselas ya había comenzado a acusar a Rusia de inmiscuirse en las próximas elecciones al Europarlamento.
Según el diplomático, "ya hablan y escriben de antemano sobre la inevitable intervención rusa en las elecciones al Parlamento Europeo".
A Rusia se la acusa con regularidad de entrometerse en el desarrollo de las campañas electorales de otros países como EEUU, Francia o Alemania.
Moscú califica estas acusaciones de totalmente infundadas y destaca la ausencia de hechos que las prueben.