Los corredores de apuestas han reducido hasta 2/1 las probabilidades de que la duquesa de Cambridge, que recientemente cumplió 37 años, anuncie que espera un bebé en el 2019, lo que indica una mayor probabilidad de noticias sobre un embarazo.
Si dan a luz a otro descendiente, el niño sería sexto en la línea de sucesión al trono, por delante incluso del príncipe Enrique.
No obstante, hay señales de que los rumores pueden ser solo eso. Durante sus embarazos anteriores, Kate sufrió de hiperémesis gravídica —un exceso de náuseas y vómitos— y tuvo que descansar mucho. Ahora, sin embargo, aparece mucho en público.
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Además, la pareja solía optar por una mayor diferencia de edad entre sus hijos. Si Kate quedara embarazada pronto, habría menos de dos años de diferencia entre el príncipe Louis y su cuarto hijo.
Si Kate y el príncipe Guillermo tuvieran un cuarto hijos, emularían a la reina Isabel II.
