"Quiero que votemos lo antes posible… y si ello implica reunir al Parlamento para celebrar la votación, hagámoslo", afirma Corbyn en una entrevista con los medios británicos, The Independent y I News.
La primera ministra ha convocado a su Gabinete el 2 de enero en un nuevo intento de solventar la crisis del Brexit.
El curso parlamentario se reanuda el 7 de enero con la agenda centrada en los términos del divorcio de la UE y la futura relación comercial y de seguridad con el club de Bruselas.
El prometido "voto significativo" sobre el acuerdo, que May canceló a última hora el pasado 10 de diciembre, está ahora previsto en la "semana del 14".
"Necesitamos celebrar esa votación para formalizar una decisión del Parlamento", señala Corbyn en la entrevista.
May retrocedió en noviembre para evitar la derrota de su plan en los Comunes y desde entonces trata de obtener concesiones de la UE que puedan afianzar su victoria en el nuevo año.
Así, el dirigente de izquierdas anticipa un nuevo retraso deliberado del Gobierno para agotar el tiempo restante y someter a los parlamentarios a la dicotomía de aceptar su plan o asumir las consecuencias sociales y económicas de una salida desordenada.
"Sospecho que es una maniobra cínica para agotar el tiempo y ofrecer a los diputados que elijan entre la espada o la pared", adelanta.
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Corbyn reafirma además su objetivo de lanzar una moción de censura contra el Gobierno conservador, probablemente después de la votación del plan Brexit.
El equipo laborista fue criticado en las bancadas de la oposición por evadir el ataque frontal contra el Ejecutivo conservador durante las semanas críticas de diciembre.
La primera ministra sobrevivió un golpe de censura de su grupo parlamentario el pasado 12 que dejó al descubierto el profundo malestar de al menos un tercio de sus diputados.
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Los "brexiteros" ultras creen que el descontento es mayor y, según sus estimaciones, la mayoría de conservadores sin un puesto gubernamental votó en contra de May en oposición a su plan Brexit.