Londres coincide así con Estados Unidos en acusar al Gobierno chico de supuesto espionaje cibernético a través de un grupo apodado APT 10.
"El Gobierno del Reino Unido ha llegado a la conclusión de que el ministerio de Seguridad Estatal chino fue responsable", afirma una nota emitida por la Cancillería británica.
El Gobierno británico, Estados Unidos y sus "aliados" alegan que APT 10 "actuó por cuenta del Ministerio de Seguridad Estatal de China para acometer campañas maliciosas cibernéticas" en Europa, Asia y Estados Unidos.
"Es una de las más importantes y amplias campañas de intrusión cibernética contra el Reino Unido y los aliados… estas actividades han de cesar", instó el canciller británico Jeremy Hunt.
De acuerdo con el ministro conservador, el supuesto grupo de hackers funciona como una tapadera del Gobierno chino para apropiarse de "secretos comerciales" y atentar contra "economías alrededor del mundo".
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Es la primera vez que Londres culpa directamente al Gobierno de Pekín de espionaje y ataques cibernéticos.