"Para proteger a nuestros ciudadanos es importante luchar juntos contra la migración ilegal, debe quedar claro para todos que los pasos unilaterales de un país no solucionarán este problema, esto es posible solo por medio de la cooperación multilateral, es la única vía", aseveró durante la conferencia de Naciones Unidas sobre migración.
Además, la canciller calificó la fundación de la ONU como una respuesta al "nacionalismo puro" y el pacto global para migración como "algo por lo que merece la pena luchar.
La conferencia intergubernamental de la Organización de las Naciones Unidas aprobó el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular.
La reunión empezó en la ciudad marroquí de Marrakech con la participación de delegaciones de más de 150 Estados.
Según el proyecto del pacto, se trata de un "mecanismo de cooperación en la esfera de migración en todos sus aspectos" entre los Estados de origen y de destino de los migrantes.
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El documento, elaborado por casi todos los Estados miembros de la ONU, no es jurídicamente vinculante, solo abre la posibilidad de una cooperación global en esta área.
El secretario general de la ONU, António Guterres, declaró que el pacto mundial ayudará a facilitar el acceso de los migrantes legales a los países que necesitan mano de obra, al mismo tiempo, determinar las formas legales de migración permitirá luchar más eficazmente contra los flujos de migrantes ilegales.
El documento, se afirma, fue preparado "con el entendimiento de que ningún Estado es capaz de resolver de manera independiente los problemas de migración".
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Los oponentes del pacto temen que su aprobación lleve a un aumento del flujo de migrantes a los países desarrollados y los activistas de derechos humanos creen que las medidas mencionadas en el pacto, no son suficientes para proteger los derechos de los migrantes.
La Administración del presidente de EEUU, Donald Trump, se retiró de la discusión del pacto a fines de 2017.
Según los datos de la ONU, el número total de las personas desplazadas en todo el mundo llegó a 68 millones, entre las cuales 25 millones son refugiados, 3 millones son solicitantes del estatuto de refugiado y 40 millones son desplazados internos.