La reunión tuvo lugar en Bruselas y se centró en la situación en el mar Negro.
"La Alianza Atlántica ya incrementó su presencia en el mar Negro y hoy [el 4 de diciembre], durante el encuentro con los aliados, dimos una clara señal de que seguiremos brindando ayuda práctica a Ucrania y permaneceremos en el mar Negro", dijo Stoltenberg.
Los barcos realizaron maniobras peligrosas, desoyeron las órdenes de parar y finalmente fueron detenidos con un total de 24 marineros a bordo.
"Volvemos a exigir a Rusia que libere inmediatamente a los marineros y barcos ucranianos", expresó Stoltenberg.
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El Kremlin, que calificó el incidente naval con Ucrania de "provocación muy peligrosa", defendió las acciones de los guardacostas rusos, al subrayar que actuaron de conformidad con la ley.
La Cancillería rusa declaró por su parte que con ese incidente Kiev busca ganar puntos de cara a las elecciones presidenciales, previstas para el 31 de marzo de 2019.