"Finlandia expresó su preocupación por la distorsión de la señal del GPS y por las amenazas a la seguridad que causa, incluido para aeronaves civiles", dice la nota.
Además, el ministerio expresó la esperanza de que "Rusia tome un proceder responsable y proporcione más información sobre el asunto".
Por su parte, el ministro del Interior de Finlandia, Kai Mykkanen, en una entrevista con Sputnik expresó la esperanza de que el incidente no afecte las relaciones bilaterales y que no se repita esta situación.
Los ejercicios Trident Juncture de la OTAN se celebraron del 25 de octubre al 7 de noviembre e involucraron a unos 50.000 militares de una treintena de países, incluida Finlandia.
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Rusia niega de plano estas acusaciones y está dispuesta a responder a posibles preguntas relacionadas con las denuncias del supuesto ciberataque al GPS, si Helsinki y Oslo se lo solicitan por vía diplomática.
