"El presidente rechazó la carta de dimisión del fiscal general, teniendo en cuenta que Yuri Lutsenko obtuvo el voto de confianza del Parlamento (…) y tiene encomendadas tareas importantes", explicó el ente citado por el diario Ukrainskaya Pravda.
En declaraciones al canal de televisión Priamiy, Lutsenko confirmó que seguirá al frente del ministerio público tras la decisión del presidente.
"No sabría decir si esto me alegra o entristece… Posiblemente, esto alargue mi responsabilidad, y voy a trabajar al máximo", aseguró el funcionario.
Durante su intervención, el fiscal general anunció que presentaría su dimisión a causa de las acusaciones de una investigación inadecuada del asesinato.
Posteriormente, los diputados no apoyaron la dimisión de Lutsenko, en una votación en la que esta obtuvo solo 38 votos a favor de los 226 necesarios.
No obstante, el fiscal general presentó al presidente la carta de su dimisión.
Ekaterina Gandziuk, rociada con ácido sulfúrico concentrado el 31 de julio en Jersón, falleció el domingo pasado.
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La policía investigaba el ataque como intento de asesinato, pero después de la muerte de Gandziuk lo clasificó como asesinato intencional por encargo.
El jefe de la Policía Nacional ucraniana, Serguéi Kniázev, informó antes sobre la detención de seis sospechosos, el tribunal decretó el arresto de cuatro de ellos.
