"Esta mañana la compañía compareció ante los jueces… Lafarge es acusada de delitos de lesa humanidad y de financiación de una organización terrorista", dice el comunicado.
En julio de 2015, Lafarge se fusionó con la suiza Holcim y en 2016, el grupo LafargeHolcim reconoció que los dirigentes de una de sus plantas, situada al noreste de Siria, financiaron entre 2012 y 2014 a terroristas para que no amenazaran la seguridad del personal.
La planta cerró en septiembre de 2014.
Más: Detenido un hombre en España por enviar dinero a una yihadista de EI
Un mes después, las mismas acusaciones fueron formuladas contra el ex director general de LafargeHolcim, Eric Olsen.
Pescheux declaró, en particular, que Lafarge pagaba 100.000 dólares mensuales al magnate local Firas Tlass, que entregaba el dinero a grupos armados a cambio de garantías de funcionamiento de la planta.