"El Reino Unido decidió abandonar la Unión Europea y ya no podrá gozar de los mismos derechos de antes… Además, los acuerdos de la UE con terceros países no podrán sustituir las ventajas que brinda la participación en la Unión, y también me refiero a la participación en los proyectos de defensa", dijo Barnier en una conferencia en Bruselas.
"Estas reglas de la Unión Europea rigen ya desde hace tiempo y el Reino Unido estará al tanto: los terceros países y sus empresas no pueden participar en el desarrollo de proyectos sensibles desde el punto de vista de la seguridad", señaló Barnier.
Pero esas reglas –continuó– no impedirán al Reino Unido, como un tercer país fuera de la UE, utilizar la señal codificada de Galileo siempre y cuando exista el respectivo acuerdo.
El sistema global de navegación por satélite Galileo es el análogo europeo del sistema estadounidense GPS y del ruso Glonass.
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Está previsto que la flotilla de satélites en el marco del proyecto Galileo alcance 26 aparatos este año 2018, y 30 aparatos dos años después.
El proyecto Galileo asciende a unos 7.000 millones de euros.