"Ofcom abrió hoy [el 18 de abril] siete nuevas investigaciones por la imparcialidad de las noticias y programas de actualidad en la cadena RT", dice el comunicado en el sitio web del regulador.
La nota indica que "desde los eventos en Salisbury, se observó un aumento significativo del número de programas trasmitidos a través de los servicios de RT, lo que justifica una investigación por presunta infracción del Código de Radio y Televisión de Ofcom".
Ofcom sospecha que el canal no solo es financiado por Rusia, sino también que "esté controlado por la Federación Rusa".
"Anunciaremos los resultados de estas investigaciones tan pronto como sea posible", concluye la nota.
A su vez, la cadena rusa RT no cambió su enfoque editorial después del incidente en Salisbury, afirmó el canal en un comunicado en respuesta a la notificación del regulador de medios británico Ofcom de que investigará a RT por su cobertura supuestamente parcial del caso Skripal.
"Nuestro enfoque editorial no cambió tras los acontecimientos en Salisbury y trataremos este asunto directamente con el regulador", dice la nota.
El escrutinio exagerado del trabajo que realiza el canal RT en el Reino Unido afectará la libertad de prensa en el país, dice la declaración de la embajada rusa en el Reino Unido a disposición de Sputnik.
A mediados de marzo Ofcom advirtió a RT de unas posibles restricciones en relación con el incidente en Salisbury.
La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, declaró entonces que ningún medio británico podrá operar en el territorio de Rusia si el Reino Unido cierra el canal RT.
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Por su parte, el regulador ruso Roskomnadzor aseguró que está dispuesto a imponer medidas simétricas contra los medios británicos, si Londres retira la licencia de emisión a la cadena rusa en el territorio del Reino Unido.
Nada más abierta la investigación, que según Scotland Yard se prolongará por varios meses, Londres responsabilizó a Rusia de estar detrás del supuesto intento de envenenamiento de los Skripal, alegando que la sustancia procede de Rusia, pese a que su origen exacto sigue sin establecerse.
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La posición de Londres fue apoyada por otros 28 países y la OTAN que, juntos, expulsaron a 153 diplomáticos rusos por el caso Skripal, a lo que Rusia respondió de forma simétrica.
