"Un niño de 8 años fue agredido (…) en Sarcelles. Porque llevaba una kipá. Cada vez que un ciudadano es agredido por su edad, su apariencia o su confesión, toda la República es agredida", apuntó Macron en su cuenta de Twitter.
Un petit garçon de 8 ans a été agressé aujourd’hui à Sarcelles. Parce qu'il portait une kippa. À chaque fois qu’un citoyen est agressé en raison de son âge, de son apparence ou de sa confession, c’est toute la République qu’on agresse. 1/2
— Emmanuel Macron (@EmmanuelMacron) January 31, 2018
Para el presidente, "es la República la que se planta hoy para luchar junto con los franceses de la fe judía contra cada uno de estos actos despreciables".
Los agresores —dos adolescentes de raza negra escondidos detrás de contenedores de basura— le tumbaron al suelo y le golpearon, pero el niño logró esconderse debajo de un automóvil.
Los atacantes no robaron nada ni profirieron amenazas o insultos antisemitas.
Sin embargo, el líder de la comunidad judía del Valle del Oise, René Taïeb, dijo que las autoridades le prometieron reforzar a los efectivos de la Operación Centinela presentes en el lugar.