Cuando los policías intentaron dispersar la multitud, los jóvenes empezaron a arrojar contra ellos botellas y otros objetos.
El incidente se produjo hacia las 21:00 cerca de Plumstead, al este de la capital.
Un joven de 16 años fue detenido y trasladado a una comisaría; más tarde quedó en libertad en el marco de una investigación que sigue su curso.