"Por desgracia, me pidieron dimitirme por una violación de las normas del comportamiento de los ministros por lo que pido perdón", reza la carta de Green a la primera ministra británica, Theresa May.
En los últimos meses cuando se desencadenó el escándalo Green sostuvo en numerosas ocasiones que la policía no le informó sobre el hallazgo.
"Acepto que debería haber sido más claro en mis declaraciones a la prensa respecto a que los abogados de la Policía hablaron con mis abogados en 2008 de pornografía en los ordenadores y que más tarde la Policía me lo mencionó a mí personalmente en una llamada telefónica en 2013", reconoce Green en su carta de dimisión.
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Por una parte, ex altos cargos policiales alegan que de su ordenador personal del Parlamento se accedió y descargaron imágenes pornográficas cuando el Partido Conservador aun no gobernaba.
Además, la periodista de The Times, Kate Maltby, acusa al ahora ex ministro de supuesto acoso sexual.
Green siempre ha negado ambas alegaciones y resistía en su puesto como aliado directo de la primera ministra.
May se ve forzada a remodelar de nuevo su equipo de ministros y, esta vez, la víspera de las vacaciones navideñas.
