El anuncio fue hecho por el portavoz de la institución, Dmitri Pobiarzhin, aunque el arresto se produjo el 25 de octubre.
"La KGB detuvo el 25 de octubre a Pavel Sharoiko, agente de inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania", dijo Pobiarzhin.
Pobiarzhin reveló también que el ucraniano creó una red de espionaje reclutando a varios ciudadanos bielorrusos.
Según la KGB, Sharoiko confesó durante los interrogatorios que trabajaba para la inteligencia ucraniana.
Las fuerzas de seguridad bielorrusas encontraron copias de documentos que Sharoiko había enviado anteriormente a Ucrania.
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"Se han obtenido evidencias contundentes sobre su operación ilegal que dañaba los intereses nacionales de Bielorrusia", destacó Pobiarzhin.
Las autoridades bielorrusas declararon persona non grata a Skvortsov que operaba bajo cobertura diplomática.
"Skvortsov fue declarado persona non grata por una actividad incompatible con el estatus de diplomático", dijo el portavoz del KGB.
El embajador ucraniano, Ígor Kizim, confirmó que Sharoiko había sido acusado de espionaje y permanecía en prisión preventiva.
"Está acusado de espionaje y actualmente se encuentra en una cárcel del KGB", dijo Kizim al canal ucraniano 112 Ukraina.
El KGB arrestó también a un ciudadano del país por espiar a favor de Ucrania.
"Fue detenido un ciudadano bielorruso que recolectaba datos secretos para Ucrania", indicó Pobiarzhin.
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Según precisó, el bielorruso confesó su delito y comunicó que recogía información sobre la capacidad de defensa del país a cambio de dinero.
"Se le ha abierto una causa penal por alta traición", señaló el portavoz del KGB.
