"Estos programas promovieron las reformas y evitaron un impago por parte de Grecia, pero la capacidad del país para financiarse enteramente en los mercados financieros sigue representando un desafío", dijo Baudilio Tomé Muguruza, miembro del TCE responsable por el informe, citando en el comunicado de la Institución.
"Ahora bien, los programas ayudaron a recuperarse a Grecia solo de forma limitada y a mediados de 2017 aún no habían logrado restablecer la capacidad del país para financiar sus necesidades en los mercados", apunta el texto.
Se indica que la Comisión Europea "carecía de experiencia previa de gestión de un proceso de estas características, y que las condiciones de los programas no se priorizaron suficientemente por orden de importancia ni se integraron en una estrategia más amplia para el país".
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El TCE constató que "las reformas en fiscalidad y administraciones públicas generaron ahorros presupuestarios si bien la aplicación de sus componentes estructurales resultó mucho menos satisfactoria".
"El sector financiero se reestructuró sustancialmente, pero a un coste considerable", evaluó.
A la vez la Institución admitió que "el descenso de la actividad económica en el mismo período, combinado con los costes de financiación de la deuda antes acumulada, hizo que la tasa de endeudamiento de Grecia con respecto al PIB aumentase continuamente".
"En consecuencia, el país seguía sin poder financiar enteramente sus necesidades en los mercados", concluyó.
En 2010 Grecia pidió ayuda a la Unión Europea por la crisis financiera.
En el tercer programa también participó el Mecanismo Europeo de Estabilidad.
La financiación del primer programa, aprobado en 2010, ascendió a 110.000 millones de euros, la del segundo, de 2012, a 172.600 millones de euros, y el tercero, de 2015, contó con el apoyo de 86.000 millones de euros.
El objetivo de estos programas era estabilizar la situación económica de Grecia, atendiendo a las necesidades de financiación de su economía a cambio de reformas estructurales de gran calado, y evitar de esta manera el contagio al resto de la zona del euro.