Amnistía Internacional instó a los países de la UE a declarar una moratoria sobre la negación de otorgar asilo a los ciudadanos de Afganistán, señalando que el número de los refugiados afganos repatriados se triplicó en un año: desde 3.300 en 2015 hasta 9.500 en 2016, mientras las decisiones de conceder asilo disminuyeron del 68% en septiembre de 2015 al 33% en diciembre de 2016.
"No podemos confirmar que tuvo lugar la "deportación masiva", según nuestros datos, solo 209 personas se vieron obligadas a regresar de la UE a Afganistán desde 2016 conforme al Plan Conjunto de las migraciones coordinado entre Afganistán y la UE", dijo el portavoz.
La OIM apoya el retorno voluntario de las personas que deciden volver por creer que no tendrán un futuro digno en el país de estancia, agregó.
También subrayó que la OIM no participó en las operaciones de la repatriación forzosa de los refugiados, señalando que tales operaciones son de incumbencia exclusiva del Estado.
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