"Toda nuestra comunidad y la familia del fallecido con cuyos miembros me he encontrado hoy exigimos justicia respecto a un delito tan bárbaro y loco", declaró Fallani.
La madrugada del 12 de agosto la policía de Lloret de Mar, en la provincia española de Girona, recibió un aviso de una pelea en una discoteca y, tras acudir al lugar, halló al italiano Niccolò Ciatti, de 22 años, herido de gravedad.
El fue trasladado en estado crítico a un hospital de Girona pero falleció la misma noche.
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Los autores de la agresión habían huido, pero al poco rato la policía detuvo en la zona del paseo marítimo a tres ciudadanos rusos de 20, 24 y 26 años de origen checheno, cuya residencia habitual se sitúa en Francia, donde se encuentran en situación de asilo.
La cadena de televisión italiana Rai mostró un vídeo en el que el padre del joven, Luigi Ciatti, pide con lágrimas aclarar las circunstancias de la muerte de su hijo y castigar a los autores del crimen.
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Según Cattani, los hombres golpearon a Ciatti sin motivo y parecían "bestias".
Señaló también que nadie en la discoteca, incluidos los guardias, trató de detener a los atacantes.
Por el momento las autoridades italianas cumplen con los trámites para retirar el cuerpo del joven fallecido.
