Burdeos, la región más afectada, puede perder hasta la mitad de su cosecha de vino, de acuerdo con el ministro de Agricultura de Francia, Stephane Travert. Se estima que hay una disminución del 40% con relación a la producción de los últimos cinco años.
Esto es un 17% menos que el año pasado y un 16% por debajo del volumen promedio de vino producido por Francia durante toda la existencia de la industria.
Según Travert, se trata de volúmenes "históricamente bajos", que pueden incluso superar el récord de 1991, cuando los viñedos también fueron seriamente perjudicados por las bajas temperaturas.
Además: Viñedos de Burdeos, Cognac y Champagne sufrieron heladas más fuertes en 25 años
Este año, para tratar de salvar sus cultivos de las bajas temperaturas de abril, los productores franceses utilizaron diferentes métodos: velas, calentadores e incluso soplaron sus parcelas desde helicópteros con aire caliente, pero todo en vano.