"Serbia cumplirá sus compromisos ante las víctimas inocentes de la agresión perpetrada contra el país. Es nuestro deber ante ellas y la muestra de nuestra responsable conducta respecto al futuro. El mal nunca debería repetirse", dijo el presidente electo serbio Aleksandar Vucic en una entrevista a la agencia Sputnik.
Por su parte, el presidente de la República Srpska, Milorad Dodik, declaró que la agresión internacional que fue cometida contra Serbia puede ser considerada por su potencia y la cantidad de intentos como "un atentado terrorista".
A su vez, el director de cine y guionista Emir Kusturica opina que el futuro monumento tendría que recordar a los serbios todo lo que pasó con ellos en el siglo pasado.
"Fue un proyecto que nos convirtió de víctimas en criminales (…). Como pueblo que sobrevivió los sufrimientos de la Segunda Guerra Mundial y los de 1999, nosotros merecemos un monumento en memoria de los crímenes cometidos contra nosotros en nombre de una civilización y contra la idea moderna de enseñar la democracia con ayuda de bombas", enfatizó.
Todavía no se conoce el numero cierto de víctimas fallecidas en los ataques de la OTAN contra Yugoslavia. En todos los documentos figura una cifra aproximada de más de 2000 personas.
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