Anoche un camionero embistió a una multitud congregada en un mercadillo navideño en la parte céntrica de Berlín, causando 12 muertos y 48 heridos.
El primer ministro eslovaco envió un cablegrama a la canciller alemana, Angela Merkel, en que expresó sus condolencias con motivo de esta tragedia.
"El ataque a las personas que visitan ferias preparándose a celebrar la Navidad es, a mi juicio, un acto de agresión contra la identidad cultural de Europa", dijo Fico.
Además repitió su famosa declaración de que mientras ocupe la presidencia del Gobierno en Eslovaquia no habrá ninguna comunidad musulmana notable, la que fue criticada en numerosas ocasiones por políticos occidentales.
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En la república eslovaca se toman medidas para fortalecer la seguridad en los lugares públicos, se ampliaron un 50% las patrullas policiales, comunicó Fico, agregando que los servicios secretos eslovacos ofrecieron ayuda a sus homólogos alemanes.