Una fuente del periódico citada por RIA Novosti informó que además de los dos rusos, la orden incluye a los serbios Predrag Bogicevic, Milos Jovanovic y Nemanja Ristic.
"La orden internacional de detención significa que Serbia debe detener a esas personas pronto, pues se dan todas las condiciones necesarias para su extradición, según el acuerdo de extradición mutua de criminales entre Montenegro y Serbia", opina Dnevne Novine.
El periódico añade que en cuanto a los rusos, "Montenegro no tiene posibilidad legal para requerir a Rusia su extradición excepto los casos en los que se encuentren fuera de las fronteras rusas".
Según la hipótesis de la investigación, pagaron al nacionalista serbio Alexander Sindjelic 200.000 euros para que organizara un grupo militante que debía ser encabezado por el excomandante de la gendarmería de Serbia, Bratislav Dikic.
Según la investigación de Montenegro, el grupo debía tomar el poder y neutralizar al primer ministro montenegrino, Milo Dukanovic.
El 16 de octubre pasado, día de las elecciones parlamentarias, las autoridades de Montenegro detuvieron a 20 serbios bajo la acusación de preparar un acto de terrorismo y un golpe de Estado.
Una semana después, el primer ministro serbio, Alexander Vucic informó que los servicios de seguridad serbios detuvieron a algunas personas por vigilar al primer ministro de Montenegro y aseguraron tener pruebas irrefutables.
El 7 de noviembre, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, negó que Rusia estuviera implicada en el atentado contra el líder de Montenegro.
"Sin duda negamos rotundamente cualquier posibilidad de que a nivel oficial se haya intentado organizar un acto delictivo", dijo Peskov.