"El Parlamento y el público necesitan conocer los términos básicos que el Gobierno aspira conseguir del Brexit", recalcó sir Keir Starmer, responsable laborista en la materia.
Brexit centrará la temática de un debate parlamentario convocado este miércoles 7 por el principal partido de la oposición.
"El Laborismo acepta y respeta el referéndum y no frustraremos el proceso de marchar de la UE", recalcó Starmer respecto a la decisión tomada por el 52% del electorado británico el pasado junio.
La jefe del Gobierno conservador asiste estos días a la cumbre anual de líderes del Consejo de Cooperación del Golfo mientras Downing Street ultima el plan de choque para evitar una humillante derrota en los Comunes.
Aunque legalmente no vinculante, la moción de los laboristas es una vuelta de tuerca más para imbuir transparencia en el proceso Brexit.
"Insta a la primera ministra a comprometerse a publicar el plan del Gobierno para abandonar la UE antes de invocar el Artículo 50", señala el texto que se someterá al voto de los diputados este 7 de diciembre.
El equipo de Corbyn busca incrementar la presión sobre May y asegurar al mismo tiempo que el eco de las inquietudes de los parlamentarios sobre el futuro del Reino Unido fuera de la UE retumbe en el Tribunal Supremo.
El debate Brexit coincide precisamente con la vista de apelación, histórica y sin precedentes, en que la corte de máxima instancia del Reino Unido ha de pronunciarse sobre si el Ejecutivo tiene la potestad de invocar el Artículo 50 sin la autorización del Parlamento.
El juicio está previsto de concluir este jueves y el veredicto se espera en enero de 2017.