"No obstante —afirma Ayoob—, Erdogan debería ser muy loco o muy estúpido para decantarse por esta estrategia. Él puede usar todo a su alcance para instaurar una forma de Gobierno presidencial, pero claramente no es tan desquiciado como para fingir un golpe de Estado. Si fuese así, y la verdad saliese a la luz, ese sería el fin de su carrera política, teniendo en cuenta el número de víctimas".
Otra versión, la promovida por Erdogan y sus aliados, es que Fethullah Gulen, quien se encuentra en EEUU, es la mente detrás de la intentona golpista, y dirigió a los militares que le son fieles a la distancia. Es verdad que las ideas y movimientos impulsados por Gulen han penetrado la sociedad turca por medio de centros educativos y organizaciones caritativas. También es cierto que muchos aliados de Gulen se encontraban en el sistema judicial, en el Gobierno y en los órganos de seguridad, y se negaron en muchos casos a seguir las ideas de Erdogan, por lo que fueron poco a poco retirados de sus puestos. Pero incluso esto no es razón suficiente para creer que Gulen esté detrás del golpe. Es improbable que los aliados de Gulen hayan podido penetrar los altos mandos de las Fuerzas Militares, supone el experto.
Según el autor del artículo, esta última versión parece la más verosímil. Seguramente fueron los militares, junto a algunos seguidores de Gulen, quienes se unieron para derribar a su enemigo. Esta es la razón por la que muchos seguidores de Gulen estuvieron entre los golpistas, lo que le permitió a Erdogan concluir que era Gulen el que estaba detrás de todo.